¿Cuál de ellas se adapta más a las necesidades de tu negocio? Conoce todas las ventajas y desventajas
A la hora de pensar en la creación de una app para tu empresa hay que tener en cuenta multitud de factores, entre ellos el tipo de aplicación del que se tratará puesto que la elección que escojamos influenciará en el éxito de la misma.
¿App nativa, web o híbrida? Entre este tipo de aplicaciones existen bastantes diferencias significativas en cuanto a tecnología de desarrollo, rendimiento, coste… Pero analicemos los pros y los contras de cada una.
Aplicación nativa
La aplicación nativa está desarrollada y optimizada específicamente para el sistema operativo determinado y la plataforma de desarrollo del fabricante (Android, iOS, etc).
Este tipo de aplicaciones se adapta al 100% con las funcionalidades y características del dispositivo obteniendo así una mejor experiencia de uso. Sin embargo, el desarrollo de una aplicación nativo comporta un mayor coste, puesto que si se desea realizar una aplicación multiplataforma se ha de realizar una nueva versión para cada sistema operativo, multiplicando así los costes de desarrollo.
Algunos ejemplos de aplicación nativa, serían Whatsapp o Facebook.
Aplicación web
La aplicación web es la opción más sencilla y económica de crear aplicaciones, puesto que al desarrollar una única aplicación se reducen al máximo los costes de desarrollo. Asimismo, en este tipo de aplicaciones, puede utilizarse el “responsive web design”, creando así una única aplicación adaptada para todo tipo de dispositivos. Por el contrario, la aplicación web ofrece una peor experiencia de uso, puesto que ignora las características del dispositivo y una menor seguridad ya que depende de la seguridad que ofrezca el propio navegador.
Aplicación híbrida
Este tipo de aplicación aprovecha al máximo la versatilidad de un desarrollo web y tiene la capacidad de adaptación al dispositivo como una app nativa. Permite utilizar los estándares de desarrollo web (HTML5) y aprovechar las funcionalidades del dispositivo tales como la cámara, el GPS o los contactos. Además, comporta un menor coste que una aplicación nativa y una mejor experiencia de uso que una aplicación web. Sin embargo, tiene un rendimiento ligeramente inferior al de una aplicación nativa debido a que cada página debe ser renderizada desde el servidor y supone una mayor dificultad de desarrollo.